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Reseña: Frankenstein, de Mary Shelley


“Hasta aquí he llegado, trazando una ruta segura sobre el mar sin camino: las mismas estrellas siendo testimonios de mi triumfo.”


Esta no será una reseña típica (ya que Frankenstein es un clásico y ya hay muchas reseñes sobre éste) si no una recopilación de pensamientos y opiniones que he tenido a lo largo de la lectura de este gran libro. Así que será una reseña subjetiva, honesta y personal (y puede que con algunos spoilers). Siempre estoy abierta a nuevas ideas, así que no dudéis en comentar lo que penséis si no estáis de acuerdo con alguna cosa que digo. Vuestros comentarios siempre son bienvenidos!


He leído la versión de 1831, la que Mary Shelley revisó y reeditó añadiendo algunas partes y reescribiendo otras. Como no he leído la edición de 1818 no sé si cambia mucho o no. Pero en esta revisión, Mary Shelley escribió una introducción donde explica como se le ocurrió esta historia y por qué decidió cambiar algunas partes de esta.


Al principio de la historia de Víctor (Capítulo Dos) hay un pasaje donde dice:

“Siento un placer exquisito en detenerme en los recuerdos de la infancia, antes de que la desgracia me contaminara la mente y cambiara las visiones brillantes de extensa utilidad en reflexiones tenebrosas y estrechas sobre mí mismo.”

Esto me recordó a la introducción de Mary Shelley, donde escribe:

“Y ahora, una vez más, pido a mi horrible progenie que siga adelante y prospere. Le tengo afecto, pues fue la descendencia de días felices, cuando la muerte y la pena no eran más que palabras, que no tenían ningún eco verdadero en mi corazón.”

Estas palabras me encogieron el corazón, ya que yo también he perdido a gente importante para mí, pero también recuerdo cuando la vida solía ser bonita e indolora, cuando la muerte no formaba parte de ella.


“¡Cuantas cosas estaríamos a punto de descubrir, si la cobardía y la dejadez no entorpecieran nuestra curiosidad!"


Avanzando hasta el Capítulo Cuatro, Víctor dice que en las ciencias (naturales) siempre puedes seguir adelante, descubrir cosas nuevas, pero que en muchas otras disciplinas de la ciencia no puedes descubrir nada más de lo que ya ha sido descubierto. Pues bien, yo aquí discrepo enormemente. En cualquier disciplina, ya sean ciencias naturales, ciencias sociales o cualquier otra rama de la ciencia, siempre puedes descubrir cosas nuevas, siempre puedes ir más allá y descubrir coses que se han estado escondiendo o que aún no han sido pensadas. Como historiadora, me sentí denigrada por lo que decía Víctor, y necesitaba decir la mía.


“Por un instante, me atrevía a sacudirme las cadenas y a mirar mi alrededor con espíritu sereno y libre; pero el hierro me había mordido en la carne, y nuevamente me sumergí, temblando y desesperanzado, en el abismo miserable de mi propio yo.”


Aprovechando que ya estoy puesta en el tema, dejaré que mis pensamientos sobre Víctor Frankenstein vaguen libres y salvajes. En Víctor Frankenstein encontramos al perfecto gentleman romántico, ¿no? Es el primer hijo de una familia acomodada, la vida el sonreía hasta que él mismo lo mandó todo a pique dando vida a una criatura de la cual justo después libró, dejándolo en este mundo salvaje, rodeado por seres (¡¡¡humanos!!!) que lo odian por no ser ordinario. Y a partir de aquí, Víctor nos intentará vender que él es la víctima de la historia, lo cual te podrías acabar creyendo si hubiese dejado de odiar al monstruo cuando Víctor se encuentra a las puertas de la muerte. Pero no lo hace, cosa que me hace pensar que, a pesar de todo por lo que ha pasado, su personalidad no cambia. Y eso es triste, sinceramente, porqué morir odiando tanto a una persona no te puede aportar nada bueno.


“Seremos monstruos, apartados de todo el mundo; pero a causa d'e eso estaremos unidos el uno al otro.”


Ahora es el turno del monstruo. En oposición a Víctor, el monstruo sí que evoluciona. Igual que un bebé, va aprendiendo gradualmente. Primero camina y desarrolla sus sentidos, después aprende a hablar, a leer y a escribir, y mientras tanto aprende qué es el amor mirando como la gente se quieren los unos a los otros, y justo después aprende lo que es el odio y el dolor en primera persona, cosa que llena su bon corazón de rabia y envidia. Creo que en parte es por eso por lo que la criatura pide a Víctor que le cree una compañera, porqué todo el mundo los repudiará, y como solo se tendrán el uno al otro tendrán que acabar juntos. Pero me gusta como la criatura sabe que, aunque consiguiera una compañera, nunca habría sido completamente feliz, porqué en fondo sabría que los humanos no le quieren, cosa que él anhelaba. Pero entonces Víctor muere, y el monstruo le perdona por todo lo que le ha hecho, aunque ya es demasiado tarde. Pero tal y como le dice a Walton al final de la historia, le movía la envidia, no la malicia. Aún así mata, por lo cual sigue siendo un monstruo.


“Tiras una antorcha sobre un montón de edificios; y cuando se han consumido, te sientas entre las ruinas y te lamentas por la pérdida. ¡Demonio hipócrita! Si este al que lloras todavía viviese, seguiría siendo el objeto, otra vez volvería a ser la presa, de tu maldita venganza. No es pena lo que sientes; te lamentas solo porqué la víctima de tu malignidad ha sido retirada del tu poder.”


Esta cita explica bastante bien el "juego" al que los dos principales personajes están jugando al final del libro. Por primera vez en su vida, el monstruo siente que el su "padre" le está prestando atención, aunque no sea la atención que él originalmente necesitaba y quería. Pero es por eso que él sigue ayudando y dando pistas a Víctor a lo largo de su caza, para que pueda seguir el rastro al monstruo y así poder seguir con este tipo de juego de el gato y el ratón. Y a la vez, es la manera que utiliza el monstruo para hacerle saber a Víctor que ha sido miserable toda su vida por su culpa, es su manera de ser cruel hacia él. Pero quiero pensar que lo que realmente quería con esta caza era cambiar la mente de su creador, hacerle ver que nadie debería estar solo, que todo el mundo merece amor en su vida. Pero Víctor no lo entiende.


Así que, ¿cuál es el objetivo de este libro? Creo que Mary Shelley quería criticar la sociedad y los prejuicios que esta tiene tan enraizados, a la vez que expresar los pensamientos y sentimientos más profundos del Romanticismo. En definitiva, Frankenstein me ha parecido triste, desgarrador y que te pone la piel de gallina, tal y como una bona novela Romántica y Gótica tiene que ser.


“Descubrió que la vida del viajero incluye una gran cantidad de pena en medio de los placeres.”



Género: Gótico, horror, ficción, ciencia-ficción.

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